Conocer la importancia del mantenimiento preventivo para aumentar la vida útil de los cilindros hidráulicos

Cilindros: definición y rendimiento

También conocido como actuador neumático lineal, el cilindro neumático es la parte responsable de mover las partes móviles en los procesos de automatización / automatización. Además, también son responsables de aplicar fuerza a estos sistemas. Así, en general se puede decir que los cilindros son los músculos de las máquinas.

El cilindro neumático está formado por un pistón y un vástago que se mueve dentro de una cámara cerrada. En él, se envía aire comprimido a la cámara debajo del pistón. Después de eso, el aire presurizado se expande y ejerce fuerza contra la base del pistón, empujándolo hacia arriba.

Los cilindros tienen una vida útil mínima, según el número mínimo de maniobras que debe realizar el mecanismo hasta su deterioro. Sin embargo, algunas partes deben analizarse cuidadosamente. El revestimiento, el vástago y los sellos son algunos de los que requieren mayor atención. Otro aspecto relevante se refiere a los fluidos. Ellos son los que, cuando se contaminan, son responsables del 80% de los problemas del sistema, impactando en otros problemas de equipos. El análisis constante de la pieza es, por tanto, fundamental para evitar problemas mayores.

La importancia del mantenimiento preventivo de cilindros

El mantenimiento preventivo tiene lugar en el seguimiento de los equipos mediante la recopilación de datos mediante el seguimiento o las inspecciones. De esta forma, con la información obtenida, es posible interpretar esta información para tomar medidas asertivas.

El mantenimiento tiene como objetivo preservar la pieza para una mayor durabilidad o vida útil, aunque a medio plazo cada vez es más necesario el cambio de componentes. Sin embargo, en general, realizar el mantenimiento antes de que se produzcan determinados problemas sigue siendo ideal, ya que también garantiza la productividad de los equipos.

Entre algunos beneficios del mantenimiento preventivo, los principales son:

• Mayor vida útil de equipos o máquinas y confiabilidad;
• Buen funcionamiento y reducción de fallas durante la operación;
• Reducción de costos con reparaciones y por problemas inesperados;
• Elimina la posibilidad de un desmontaje innecesario;
• Reducir las paradas de emergencia; y
• Predetermina las interrupciones de la fabricación.

Sin embargo, para el inevitable mantenimiento que sin duda se producirá, es importante contar con una empresa cuyo trabajo sea serio, creíble y transmita confianza. El prestador de servicios debe, a su vez, presentar certificaciones, como revendedor o distribuidor, además de un historial de buen servicio.

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